Visitantes

lunes, 14 de octubre de 2019

LA CIUDAD DE LAS FLORES

LA CIUDAD DE LAS FLORES
MELVIN MARTÍNEZ
melvinadalidmr@gmail.com
Nuestra ciudad es un jardín. Cada casa, cada barrio, cada calle, está llena de flores.
Es hermoso ver como se cultivan flores en los patios, en maceteras, en troncos y en cualquier
recipiente reciclable.
Son muchas las familias que tienen el cultivo de flores como pasatiempo y que se empeñan para
que sus jardines luzcan hermosos. Algunas se especializan en determinadas especies y todas sus
variedades: orquídeas, geranios, rosas, anturios, cactus, eliconias, bromelias y otras comunes o
exóticas.
Hace muchos años existe en la ciudad un club de jardinería integrado por mujeres que se lucen
embelleciendo espacios en diferentes eventos cuando se los solicitan y cuyos jardines familiares son
una belleza acogedora.
Adornan la ciudad  bellos  muros  con flores colgando.
Tenemos flores  en todos los meses,  todos los días.
En abril la Belleza de las flores de las acacias, los macuelizos, caraos, algunos sanjuanes hacen
hermoso el paisaje.
Las flores permanentes de las bugambilias o napoleones le dan vida a la ciudad, muchas casas
adornan sus cercas con los variados colores de las flores de los napoleones. La calle 21 de agosto
está llena de flores multicolores de esta bellísima especie.
Chinas, geranios, margaritas, rosas, anturios, flor de seda, siempre vivas, llama del bosque, flor de
pino, San Carlos, bastón de la reina, mar Pacífico están aquí en cualquier jardín de casa.
En diciembre tenemos flores que caracterizan nuestro municipio: son las flores de tatascán y girasol
silvestre las que adornan la orilla de la carretera internacional y caminos rurales. Estas hermosas
flores amarillas nos hacen sentirnos en navidad.
Siguatepeque es un un vergel hermoso, acogedor y relajante. Cada universidad, escuela, colegio,
cada jardín de niños es eso: un jardín.
En los últimos años el festival de las flores, excelentemente organizado por aalgunas empresarias
locales, ha incentivado aún más a la población a valorar el cultivo de las flores.
Esta actividad cultural, que ha tenido un fuerte apoyo de una parte del empresariado con mayor
visión para aprovechar el turismo nacional e internacional, ha posicionado a Siguatepeque cómo la
ciudad de las flores y ha abierto una oportunidad, a todos los sectores de la sociedad, para hacer
negocio.
En este tiempo que la ciudad es visitada por hondureños y extranjeros, la gente de Sigua pone en
acción su sensibilidad, su capacidad de servir y amabilidad para dar el mejor trato a quienes abren
sus ojos y su interés a esta ciudad de las flores.
Lastimosamente no se ha desarrollado empresarialmente la producción de flores en esta región.
Hay en el municipio solamente dos empresas grandes que cultivan flores a gran escala.
Los viveros locales, ubicados en su mayoría en el corredor de la carretera CA-5, no producen todas
las plantas y flores que venden.
Hacen falta empresarios que aprovechando las bondades de nuestro clima inviertan en la
producción de flores.
Hay pequeños y hermosos emprendimientos como "la casa de los anturios" que produce esta flor
tan hermosa. Esta pequeña empresa, originalmente, presta el servicio de hospital de plantas. Aquí la
gente puede llevar sus plantitas enfermas para que las manos y el cariño de Doña Marcia Cano las
curen, después de un dedicado y delicado tratamiento.
La cultura de las flores ayuda no sólo a embellecer los hogares, las calles, la ciudad y las aldeas,
también nos regala tranquilidad, nos llena de vida, de esa vida que nos quita la sociedad consumista
y la rutina cotidiana.
Nuestra ciudad es un jardín, cada casa, cada barrio, cada calle está llena de flores, todos los días
Siguatepeque, el cerro de mujeres bellas, nos saluda con un ramo de flores para hacernos sentir en
un agradable paraíso.

No hay comentarios:

Publicar un comentario